Cuanto más natural y más simple, mejor. El skinimalism trae una nueva forma de entender el cuidado de la piel, basada en el minimalismo tanto en las rutinas de skincare como en maquillaje.
Porque queremos tener una piel sana, natural y fresca. Pero es que además queremos lucirla sin esconder sus imperfecciones. ¿Qué importa una pequeña mancha? ¿Por qué un día empezamos a esconder las pecas? La piel sana es bella.
Vamos a ver cómo el skinimalism hace que una piel natural sea tendencia.
Skinimalism: claves de un movimiento que va más allá de la piel
¿Por qué complicarlo si podemos hacerlo fácil? Menos es más. Esa es la idea.
A la hora de cuidar la piel, hay rutinas que son efectivas, pero nos llevan mucho tiempo y exigen una dedicación que a veces no podemos (o no queremos) darle. A mí cada vez me gusta menos complicarme la vida.
Sin embargo, me gusta tener una piel fresca, sana, hidratada, flexible.
¿Se puede tener todo? Por supuesto que se puede. Pero antes de contarte nada más concreto me gustaría explicarte el por qué del skinimalismo y qué sentido tiene que llegue precisamente ahora.
Hay que tener en cuenta que venimos de pasar meses complicados, en los que muchas personas hemos recolocado nuestras prioridades y nuestros valores.
Además, ahora pasamos más tiempo en casa y dejamos que la piel descanse. Los encuentros sociales han disminuido y hemos redescubierto que la piel al natural es perfecta.
Pero el skinimalismo me encanta no solo por eso, además:
1. El tiempo es valioso: una rutina sencilla te permite ahorrar mucho tiempo
A mí me gusta maquillarme, y hay días en que lo hago a full, si la ocasión lo requiere.
Pero he descubierto que la piel cuidada y luminosa es bella en sí misma, así que he simplificado mucho mis rutinas de skincare y utilizo productos de maquillaje que aporten brillo, resaltando la textura natural de la piel.
A veces con una base de color y una máscara de pestañas puede ser más que suficiente. En tres minutos, lista.
Porque mi tiempo importa y quiero aprovecharlo al máximo.
¿Ves por qué el skinimalism llega en el momento adecuado?
2. Reducir rutinas = reducir envases
Por eso, todo lo que podamos hacer para simplificar, es remar a favor. Menos consumo. Más ahorro. Preferencia por la sencillez.
Quizá pienses que tu pequeña contribución no es gran cosa, pero la actitud sí lo es.
Y, de verdad, no necesitas tener mil potingues en casa. Yo he descubierto que con cuatro básicos mi piel puede estar igual de estupenda.
Piel cuidada, rutinas naturales: ¡me gusta el skinimalism!
No se trata de abandonar las rutinas de skincare, ni muchísimo menos, pero sí de simplificarlas.
Primero una limpieza al despertar, que puede terminar con agua fresca sobre la cara. Seguidamente, unas gotas de sérum combinadas con nuestra crema hidratante. Y luego con un toque de color básico es suficiente para comenzar el día.
Esta filosofía implica también no esconder las imperfecciones como hacíamos antes, ocultándolas bajo una gruesa capa de corrector.
Por lo tanto, ¿tienes pecas? Lúcelas con orgullo porque son bonitas así.
A la hora de elegir productos, vete hacia las texturas ligeras y frescas para cremas y geles. También los serums son una buena opción.
Y nada de renunciar al maquillaje. El skinimalism va un paso más lejos que el no makeup makeup, o maquillaje sin maquillaje, cuya prioridad es que no se note que vamos maquilladas.
Un maquillaje skinimalista puede notarse, pero cuidando que el resultado tenga siempre un acabado natural.
Completa con un toque de blush que destaque lo justo, sombras en tonos neutros y un labial nude o bálsamos hidratantes con un punto de color.
Cosmética responsable: ¿Qué podemos tener en cuenta a la hora de elegir productos?
Algo que ahora miro mucho más son las etiquetas y los fabricantes de los productos que consumo.
Es vital saber la composición de los productos que utilizamos, si han sido o no testados en animales, si son ecológicos u orgánicos. Yo intento utilizar productos cruelty free que usen ingredientes naturales.
Ojo al packaging. ¿De verdad hace falta tanto plástico? Yo intento comprar productos con envases de cartón, reciclados o biodegradables. El respeto por el medio ambiente y la huella ecológica en los procesos de producción son factores a tener en cuenta a la hora de comprar.
¿Y en el look? También se llevan las joyas minimalistas
Siguiendo la misma tendencia, muchas apostamos por simplificar en todos los terrenos. Las joyas minimalistas nos ayudan a conseguirlo.
Cuidamos igualmente su elección, pero nos decantamos por piezas delicadas. En este caso, la sofisticación está precisamente en la sencillez de cada una de las piezas para que las posibilidades de combinación sean infinitas.
Un collar que puede ser perfecto es el Kala Gold. Tres vueltas, con una cadena finísima y tres detalles geométricos de formas muy puras. Perfecto para iluminar tu cuello con la impresión minimalista que quieres causar.
Anillos y pendientes siguen la misma tendencia. Un ejemplo de joya minimalista es este anillo Stick Gold, tan simple pero tan bello, con ese adorno mínimo pero imprescindible. Si ya lo combinas con los pendientes Stick Gold, el look está completo.
Y en nuestros pendientes, el minimalismo hace que cualquier Mix & Match sea perfecto, como este combo:
Y, ahora sí, cuéntame tú: ¿te has pasado al skinimalism en tus rutinas de cuidados? ¿Qué pautas has cambiado? ¿Te sientes cómoda llevando joyas minimalistas?
Me gustará mucho saber que te apuntas a las nuevas tendencias.